
Dra. Gloria González Aseguinolaza
Directora del Programa de Terapia Génica y Regulación de la Expresión Génica, Centro de Investigación Médica Aplicada, Universidad de Navarra
P: ¿Qué es la terapia génica?
GG: La terapia génica (TG), desde el punto de vista conceptual, se explica de forma muy sencilla: consiste en utilizar material genético ADN o ARN para curar una enfermedad.
P: ¿Cómo se realiza?
GG: La parte más compleja de la TG es introducir el material genético (ADN o ARN) en la célula. Es esencial, para que la TG funcione, que el material genético entre en célula diana en la cual se origina la enfermedad. Para ello es necesario el uso de “vectores” o vehículos, capaces de atravesar las barreras físicas y biológicas que tienen las células, como las membranas celulares o enzimas, cuya función es degradar el DNA ó RNA, y que no permiten de forma fácil la entrada del material genético (MG).
Los vehículos que utilizamos para introducir el MG en la célula pueden tener un origen viral o no viral. Los más utilizados, y los que tienen una mayor eficiencia, son los vehículos de origen viral, ya que los virus son las máquinas perfectas para introducir material genético en la célula puesto que es lo que hacen de forma natural para poder propagarse. Los virus utilizados en terapia génica son modificados con el objetivo de eliminar su patogenidad y su capacidad de replicación y propagación.
P: ¿Qué aplicaciones tiene la terapia génica, puede aplicarse al diagnóstico precoz?
GG: La TG no tiene como objetivo el diagnóstico precoz (DP). El DP es poder determinar qué enfermedad tiene el paciente lo antes posible, la TG lo que trata es de curarlo. Sí que es cierto que cuando se desarrolle una terapia para una determinada enfermedad, para la cual no se aplica un DP, muy probablemente el hecho de que exista dicha terapia hará que se avance en el desarrollo de un DP. O dicho de otra manera, un diagnóstico precoz tiene sentido cuando se puede ofrecer algo al paciente que modifique la evolución de la enfermedad aplicado en estadios tempranos, el hecho de contar con una terapia incentivará su desarrollo.
P: ¿Qué tipo de paciente se puede beneficiar más de la terapia génica?
GG: Actualmente la TG se puede aplicar tanto en enfermedades hereditarias como en adquiridas, como pueden ser el cáncer o las enfermedades infecciosas. La mayoría de los ensayos clínicos que se han hecho hasta el momento, se aplican a pacientes con cáncer, ya que son más numerosos en cuanto a población total. Sin embargo, los resultados no eran especialmente buenos, hasta hace poco.
Pero en los últimos años, con el uso de los linfocitos T, modificados genéticamente, capaces de reconocer las células tumorales y eliminarlas, esto está cambiando de forma sustancial. La población más beneficiada van a ser los pacientes con tumores respondedores a tratamientos de inmunoterapia.
Pero lo que es más obvio, y quizás es lo que vamos a ver en el futuro de forma más evidente, es el tratamiento de pacientes con EE.RR monogénicas, es decir, que son deficitarios en un único gen, donde el objetivo de la terapia génica es introducir una versión correcta del gen en las células del paciente y en un futuro, esperemos no muy lejano, corregir el problema en el propio genoma del paciente.
P: ¿Existen diferencias entre países/regiones en la aplicación de la misma?
GG: Realmente existen las mismas diferencias que nos encontramos para casi todos los desarrollos médicos. Las diferencias se deben al desarrollo y al potencial económico de esos países. Cualquier tratamiento actual, que no tiene por qué ser excesivamente caro, sabemos que se utiliza más en países desarrollados que en países en desarrollo. En el caso de la TG esto es todavía mucho más acusado, ya que son terapias cuyo desarrollo es muy costoso y por tanto el medicamento que se genera es muy caro, de forma que fundamentalmente se aplica en países altamente desarrollados como UE, EE.UU y Japón.
P: ¿Cuáles son las barreras a las que se enfrenta su desarrollo?
GG: Actualmente la principal barrera es la producción de los sistemas de vehiculización de material genético. Producir los vectores a gran escala y en grado clínico continua siendo un reto y muy pocos centros consiguen hacerlo. Obtener la prueba de concepto de la eficacia de un determinado producto se ha logrado para muchísimas enfermedades. Sabemos que en un modelo animal funciona bien, pero cuando vamos a un paciente hay que multiplicar por mil la cantidad de vehículos que necesitamos y los necesitamos en unas condiciones muy puras. El principal desafío es técnico, que consiste en desarrollar sistemas de producción a gran escala y en condiciones de grado clínico, para que el vector sea capaz de beneficiar clínicamente a un número significativo de pacientes.
P: ¿Qué papel tiene actualmente la terapia génica en el tratamiento de las enfermedades raras?
GG: De forma intuitiva podemos pensar que el uso de la TG se puede dirigir a enfermedades donde el origen está en la deficiencia de un gen o varios genes. En las EE.RR una gran mayoría se deben a deficiencias en el material genético, como consecuencia de la ausencia o el mal funcionamiento de un gen. Si podemos identificar cuál es el gen que falta, o que funciona mal, y podemos transportarlo hasta las células, podremos tratar de curar la enfermedad. Así la TG sería el tratamiento obvio de muchas EE.RR donde el origen es una deficiencia genética.
P: ¿Cómo considera usted que será el futuro de la terapia génica en el tratamiento de las enfermedades raras?
GG: Como siempre, en cuanto empezamos a probar un nuevo tratamiento vemos las limitaciones de la terapia. Creo que habrá EERR que no se van a poder curar con TG, pero sí va a ser el tratamiento convencional para muchas enfermedades monogénicas. Por ejemplo, los datos obtenidos en pacientes con hemofilia o inmunodeficiencias severas señalan un beneficio clínico muy significativo, curación o una atenuación de la patología. Creo que se van a convertir en tratamientos que en el futuro se aplicarán de forma regular, para algunas enfermedades, de tal manera que cuando un paciente con una EE.RR acuda al médico le prescribirá como tratamiento un vector de terapia génica.